Base Bíblica:

Mateo 19:26 "Y mirándolos Jesús, les dijo: Para los hombres esto es imposible; mas para Dios todo es posible."

 

Tema General:

Omnipotencia Divina

Himnos:

Señor, mi Dios", Himnario Adventista, No. 67.

Clausura: "El mundo es de mi Dios", Himnario Adventista, No. 78. "La Fe de Jesús", Melodías de Victoria, No. 69.

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A continuación enumero algunas curiosidades o hechos asombrosos que han coleccionado algunos autores. Nárrelas brevemente en la sección de anuncios del programa que antecede al suyo e, invite a los presentes a venir a la próxima reunión de los jóvenes en donde se considerará a "Dios y sus Hechos Asombrosos".

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OBJETIVO

Ilustrar a los jóvenes que el Dios al cual sirven no solamente hizo, sino que hará milagros impresionantes y hechos asombrosos para gloria y honra suya y en favor de los que le aman.

a) El 25 de agosto de 1891, Jaime Bartley cayó del barco donde navegaba a las profundas aguas próximas a las Islas Malvinas. Esto ocurrió mientras intentaba arponear un cachalote de ochenta (80) pies de largo. Habiéndolo dado por muerto, los obreros del barco se olvidaron de Bartley y se dieron a la tarea de cortar capas de grasa del cachalote que finalmente pudieron capturar. Todos se asombraron al observar que algo se movía en el inmenso estómago. Lo abrieron con un cuchillo y adentro encontraron a Bartley. Estaba inconsciente, pero recuperó -el conocimiento cuando le echaron agua fría por encima. Esto fue sin duda un hecho asombroso.

b) En abril de 1929, se acabaron las provisiones en la Misión Adventista de Angola. Había una sequía terrible y faltaba el alimento. Se convocó una reunión los cincuenta habitantes de la Misión acudieron a orar. Poco tiempo después de terminar la reunión, una niña regresó con las manos llenas de una sustancia ambar Relató cómo tres europeos le dijeron: "Es maná. Tomen y coman". Al salir, todos presenciaron este hecho asombroso que ocurrió durante tres días y solamente en las dieciséis hectáreas de terreno despejado de la Misión. Pensando que nadie querría creerlo, el director envió un frasco de maná a las oficinas de la División Sudafricana. La sustancia era dulce como la miel y sumamente nutritiva. Ha habido quienes han sostenido que el maná es sólo una sustancia que se desprende cierta planta gomosa del Africa, pero los únicos árboles que había en. esa Misión eran naranjos. Esto fue sin duda un hecho asombroso.

c) El coleccionador de curiosidades, Roberto Ripley, dijo que las aguas del río Nahr Al-Aros, ubicado en El Líbano, corren normalmente los primeros seis días de la semana, y en el séptimo se detienen. El hábito curioso de este río fue documentado por el Dr. Vogelstader, y su informe se puede encontrar en la Enciclopedia Alemana. Y así, en su manera extraña, la naturaleza ilustra que el séptimo día es día de reposo. Este también es sin duda un hecho asombroso.

DEL AUTOR AL DIRECTOR

El tema que se trata en este programa es de interés para los jóvenes. Por naturaleza, a los jóvenes les gusta hablar y escuchar sobre cosas fuera de lo común. Aproveche ese interés típico de su edad para mostrarles los hechos asombrosos de Dios. Quizás ellos conocen estas historias desde que pasaron por la escuela bíblica, pero necesitan que usted, con un programa como éste, les haga crear conciencia de que fueron hechos reales obrados por Dios y no meras historietas.

Ilustre cada parte en la medida que se pueda. En los rollos de láminas de Escuela Sabática aparecen la mayoría, sino todas, las ilustraciones para las partes Busque los rollos, ubique las láminas y utilícelas. De no ser posible, presente fotos que tengan que ver con el milagro en cuestión. Por ejemplo: En el milagro del hacha que flotó, podría ilustrarla con un hacha en la mano, la más grande que consiga. En la parte "Ropa y Zapatos para Cuarenta Años", podría vestir al que presentará la parte con una vestimenta típica de tierras bíblicas. "El Sol Retro puede ilustrarse mejor sosteniendo en las manos un mapa de mesa o globo terráqueo En la parte "La Oreja de Malco", puede mostrar una espada, alguna foto que muestre el antes y después de una cirugía plástica o algunos instrumentos de cirugía, bisturí, etc.

INTRODUCCION

Durante siglos el hombre se ha dedicado a la observación y contempla de sucesos raros y hasta curiosos que ocurren cada día. Ello ha provocado en el hombre el deseo de saber la razón de ser de esos hechos. Estos casos ha podido investigarlos, en otros no. La razón de esto es porque muchos de esos hechos son sobrenaturales o milagrosos. Su autor es Dios, quo está al alcance de la investigación humana. "iOh profundidad de las riquezas la sabiduría y de la ciencia de Dios! i Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos!" (Romanos 11:33).

Las páginas sagradas nos relatan impresionantes incidentes que les ocurrió a algunos de sus personajes. Cualquiera de ellos es más impresionante que la lista de hechos increíbles que logró coleccionar el norteamericano Roberto Ripley y que tituló: "Aunque usted no lo crea". El poder de Dios manifestado en los hechos asombrosos que hoy mencionaremos, nos confirma una vez más que servimos a un Dios poderoso. El obrará milagrosamente: 1) para su gloria y honra, 2) en favor de millones, miles, cientos o una persona, 3) en circunstancias de emergencia o en las actividades comunes del diario vivir.

Puede ser que, al estudiar estos milagros en este siglo de incredulidad, algunos lleguen a pensar que es imposible que tal cosa ocurriera o vuelva a ocurrir. Pero no olvidemos las palabras de Jesús: "Para Dios todo es posible" (Mateo 19:26). Lo único que necesitamos tener es fe como un grano de mostaza (Mateo 17:20).

LA OREJA DE MALCO

La cirugía es, quizás, la rama más antigua de la medicina. Se dice que los indostanos de la época de Asoka (500 años antes de Jesucristo), fueron hábiles cirujanos estéticos, conocedores de innumerables instrumentos quirúrgicos. La cirugía estética tiene por objeto restaurar o modificar partes del cuerpo recurriendo al transplante de tejidos vivos.

El Señor Jesucristo realizó la cirugía estética más rápida que jamás se haya visto. Fue en ocasión de su arresto (véase Juan 18:10; Mateo 26:51). El testimonio de Mateo y Juan se unen para decirnos

que Pedro saltó en defensa de Jesús cuando se intentó arrestarlo , sacó su espada y le "cortó" o "quitó" la oreja derecha a Malco, siervo del sumo sacerdote. Inmediatamente corrió la sangre y la oreja de aquel hombre se desprendió de la cabeza. Con la rapidez que el momento requería, el único médico presente, que era por cierto el era arrestado, se libró de las manos de los soldados y en cuestión de segundos, sin instrumentos quirúrgicos, pegó la oreja al siervo.

Allí se obró un impresionante milagro que fue el último de Cristo antes de ser crucificado. Hoy, dos mil años después de este incidente, con técnicas de cirugía estética más avanzadas, el hombre no ha podido hacer cosa semejante en tan poco tiempo. Arreglar una oreja mutilada requerirá varias intervenciones del cirujano estético y el pago de altísimos honorarios. En cambio, la oreja de Malco quedó como en su estado original en forma inmediata y sin pagar absolutamente nada.

¿Necesitas alguna cirugía interna del corazón o la mente? ¿Necesitas en tu carácter alguna cirugía estética? ¿Padeces de alguna enfermedad espiritual maligna? Si es así, ve a Jesús, pues como dijo un afamado médico: "Una operación quirúrgica difícil es una obra del Espíritu más que de las manos".

ROPA Y ZAPATOS PARA CUARENTA AÑOS

¿Recuerda usted cuántos pares de zapatos ha usado durante toda su vida? ¿Cuánto tiempo le duró el último par de zapatos que compró? Seriamos más que benditos si, usando los mismos todos los días, su duración llegara a los tres años. Resultan asombrosas las palabras registradas en Deuteronomio 29:5: "Y yo os he traído cuarenta años en el desierto; vuestros vestidos no se han envejecido sobre vosotros, ni vuestro calzado se ha envejecido sobre vuestro pie". Ni aun los pies se le hincharon durante esos cuarenta años (8:4). Sin lugar a dudas, esto fue por intervención milagrosa de parte de Dios.

Este hecho se convierte en uno más increíble, cuando tomamos en consideración los lugares escabrosos, áridos y pedregosos por los cuales el pueblo peregrinó. Estimamos que un israelita caminaba diariamente mil pasos, que era lo mínimo por ser peregrinos, entonces habría caminado no menos de quince millones de pasos cuarenta años. ¿Tremenda suela o milagro de Dios? ¿Y qué diremos de su ropa. Ropa de cuarenta años de vieja, usándola todos los días y ni siquiera se envejeció. La ropa fue lavada no menos de dos mil cien veces si promediamos a una lavada por semana.

UNA ASNA QUE HABLA

(Narre brevemente Números 22:21-33.) ¿Qué pensaría usted si mañana al despertarse su mascota le da los buenos días y le pide, con voz de hombre, que le algo de comer? ¿Qué pensarían de usted aquellos a los cuales le cuente esa hazaña? La Biblia dice que

"Jehová abrió la boca al asna, la cual dijo a Balaam: ¿Qué te he hecho, que me has azotado estas tres veces?". Lleno de ira al verse así estorbado su viaje, Balaam contestó a la bestia como si ésta fuese un ser racional: "Porque te has burlado de mí? Ojalá tuviera espada en mi mano, que ahora te mata

Solamente las aves del orden de las psitáceas o loros pueden llegar a aprender a repetir palabras y hasta frases enteras. Para lograr eso es necesario repetir muchas veces las mismas palabras, pronunciándolas siempre en la misma forma y emitiendo los sonidos con absoluta claridad. Aparte de esta excepción, solamente el hombre puede hablar. Pero lo que es imposible para hombres, para Dios es posible. Dios soltó la lengua de aquella bestia para que hablara como un ser racional.

Balaam estaba cegado por la codicia y la ambición punto que no podía discernir al ángel de Dios que era visible para su bestia. De igual forma, "el dios de este siglo (Satanás), cegó el entendimiento de los incrédulo (2 Corintios 4:4). Si por el contacto con los incrédulo se te ha pegado la ceguera espiritual, pídele a Jesucristo que unja tus ojos con colirio para que veas (Apocalipsis 3:18). Y si piensas que no puedes testificar por Cristo porque eres de pocas palabras, medita en la experiencia de Moisés (Exodo 4:11, 12) y considera la limitación del asna de Balaam. Si Dios la puso hablar a ella, que no podía, cuánto más no hará por ti!

UN HACHA FLOTA

El físico inglés, Isaac Newton, formuló la ley de la gravitación universal. Según él, la gravedad es la atracción que la tierra ejerce sobre todos los cuerpos está en relación con la masa de los cuerpos y la distancia que los separa.

En 2 Reyes 6:1-7 la Biblia narra un incidente que fue más allá de lo que establece la ley de la gravitación universal. (Narre brevemente los versículos citados.) Los judíos usaban hachas de hierro desde tiempos muy antiguos. Una muestra esta en el Sermón del Monte Jesús dijo: "Y por el vestido., ¿por qué os afanáis Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; pero os diga que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así' como uno de ellos. ...Si Di los viste así, ¿no hará mucho más a vosotros?" (Mateo 6:28-30). Dios cumplió esta promesa en el desierto y la cumplirá hoy también con nosotros.

DIOS Y SUS HECHOS ASOMBROSOS

La herramienta con ese peso seguramente se fue al fondo del río Jordán. El profeta cortó un palo o cabo y lo echó en el mismo lugar. De inmediato ocurrió lo increíble: el hacha flotó. El hierro que estaba en el fondo, más allá del alcance de los hijos de los profetas, subió a la superficie y permaneció allí por intervención divina. Semejante milagro ocurrió cuando Pedro flotó y caminó sobre las aguas.

Posiblemente haya quienes piensen que el milagro de hacer flotar el hacha fue uno innecesario. Razonan que sólo debería pedirse la intervención divina en las cosas importantes. Pero debemos reconocer que no hay dolor ni pena que sufran los hijos de Dios sin que el Padre sienta compasión de ellos. Dios tiene profundo interés en los asuntos y problemas que tienen sus hijos, y su providencia obrará de la forma que estime necesaria a fin de ayudarlos y suplirles sus necesidades. Puede no haber un Eliseo presente, pero Dios, a su manera, obra en favor de sus hijos que confían en él.

Estimado joven, ¿no sientes a veces que te estás hundiendo en las turbulentas aguas de los problemas? Hay muchas cosas que nos hacen sentirnos con el "agua al cuello", ¿no es cierto? Cuando Pedro comenzó a hundirse en las aguas del mar clamó: sálvame!" (Mateo 14:30). Esa también debe ser tu ferviente oración cuando comiences a hundirte. De seguro flotarás sobre las aguas como Pedro y como el hacha.

EL SOL RETROCEDE

El rey Ezequías lloró inconsolablemente cuando el profeta Isaías le dijo: "Ordena tu casa porque morirás". Entonces hizo una oración entre lágrimas en donde pedía que se le añadieran años de vida. Dios tuvo misericordia de él añadiéndole quince años de vida y dándole una impresionante señal: el sol retrocedería diez grados. A Ezequías se le dio a elegir si quería que la sombra se adelantara o retrocediera. El rey quiso escoger la alternativa más difícil (2 Reyes 20:9, 10).

En los tiempos de Josué, Dios obró un milagro con el sol deteniéndolo en el mismo lugar casi un día entero (Josué 10:13). El milagro operado en el caso de Ezequías fue mucho más impresionante que el de Josué, ya que en el primero no sólo se tuvo que detener el sol, sino que retrocedió diez grados.

Actualmente sabemos que fue la Tierra la que retrocedió diez grados en su movimiento de rotación. Sin embargo, este hecho no le resta credibilidad a un milagro tan impresionante. La Tierra gira sobre su eje a la velocidad de 1,666 kilómetros por hora Su peso es de seis mil trillones de toneladas. ¿Puedes imaginarte la fuerza que hay que hacer para! detener una esféride con ese peso que viaja a esa velocidad?

¿Tienes algún problema más difícil que el de Ezequías y más fácil que el de detener la Tierra? Si es así, ve a Dios, él hará algo por ti.

EL PEZ Y EL ESTATERO

(Relate brevemente Mateo 17:24-27.) Este tributo no era un impuesto civil, sino una contribución religiosa exigida anualmente a cada judío para el sostén del templo. Solamente estaban exentos

de ese pago los sacerdotes, levitas y los profetas. Jesús estaba libre de ese pago por cuanto, además de ser verdadero sacerdote y profeta de Dios, era también hijo del Rey del Universo. Aquel para quien el templo era la casa de su Padre, no estaba obligado a pagar. Israel, el pueblo profeso de Dios, debia sostener el culto y él templo.

Aunque Jesús no se hallaba bajo la obligación de pagar tributo, no entró en controversia alguna con los judíos acerca de este asunto. Ellos no estaban preparados para entender la razón que lo eximia. Hubieran interpretado mal sus palabras y las habrían vuelto contra él. Y si por otro lado, hubiera pagado el impuesto sin protesta, habría reconocido virtualmente la justicia del pedido y habría negado que era hijo del gran rey.

Jesús, entonces, decidió pagar el tributo para no ofenderles, pero de una indirecta. Aunque lo pagó y nadie podía reclamarle, no lo hizo de su propio bolso como los judíos tramaron que lo haría. El Maestro le dijo a Pedro: "Ve al mar y echa el anzuelo, y el primer pez que saques, tómalo y al abrirle la boca, hallaran un estatero; tómalo y dáselo por mí y por tí" (Versículo 27). El mismo que dio órdenes al gran pez para que transportara en su vientre a Jonás hasta Nínive, también ordenó a un pequeño pez, que tenía una moneda en boca, a morder el anzuelo que Pedro echó al mar.

Todo parece indicar que a Pedro le gustaba pescar con las redes y no con el anzuelo, pero por haber obedecido el pedido de Jesús, no sólo fue testigo de un milagro impresionante, sino que del privilegio de que le pagaran su propio impuesto. Es así, la obediencia sic paga buenos dividendos.

CONCLUSION

En nuestro programa de hoy, solamente hemos enumerado algunos de los milagros o hechos increíbles que aparecen en las Escrituras. Cada quien necesita estudiar frecuentemente estos incidentes bíblicos a fin de que la fe en Dios pueda fortalecerse cada día.. Como hemos podido ver en cada case un Dios que se interesa por los que confían en él y obrará prodigios y milagros a favor de ellos si es necesario. Los hechos asombrosos de Dios están íntimamente relacionados con la fe de los espectadores, la fe de los afectados directamente fe de aquellos que habrán de oír sobre el mismo.

Mientras, por un lado, la ola de incredulidad empuja a muchos a decir que los milagros no existen y que son incompatibles con la naturaleza y los propósitos Dios, por otro, se levantan falsos obradores de milagros que con la ayuda de y sus ángeles caídos, engañan a multitudes y las conducen al error. Cada joven consciente de estos extremos, debe mantenerse en el centro de tal forma que con la ayuda del Espíritu Santo, detectar y contemplar los verdaderos milagros que Dios obra en la vida de sus hijos.

Alabemos a Dios porque, ahora como en el pasado, nos sigue dando prueba; dubitables de su poder aun en las actividades sencillas y ordinarias de la vida que era hijo del Gran Rey.

Himno final

 

Oración