Max Mace, leyenda musical adventista, pasó al descanso a los 82 años

Después de una batalla contra el cáncer, la leyenda musical adventista del séptimo día, Max Mace, pasó al descanso el 4 de noviembre de 2020, un día antes de cumplir los 83 años.  Su familia dijo que Max Mace se encontraba en casa, en Placerville, California, Estados Unidos al momento de su fallecimiento.

Max Mace y su esposa, Lucy, quien le sobrevive, formaron el grupo Heritage Singers, dedicados a interpretar música cristiana. Ambos adventistas del séptimo día, el matrimonio Mace quisieron traer armonías contemporáneas a sus hermanos creyentes. Durante las siguientes cinco décadas, los Heritage Singers emplearían un total de 300 cantantes —generalmente ocho a la vez— y celebrarían conciertos en más de 80 países. La cantidad de personas que los vio en persona asciende a varios millones, una cifra que se multiplica  exponencialmente al considerar a la de aquellos que escucharon sus grabaciones en vinilo, CD o a través de la radio.

“Él sabía que su ministerio era justamente la  música y justamente amar a las personas”, dijo John Lomacang, un pastor, evangelizador y cantante adventista del séptimo día quien cantó sobre la base de tiempo completo con el grupo, de 1984 a 1986 y continuó haciéndolo en tiempo parcial durante 20 años, comenzando en 1989.

“Él poseía un oído especial para el ‘sonido’ Heritage”, explica John Lomacang. “Aunque la lista de cantantes en el grupo ha ido cambiando con los años, todavía posee un sonido que no puede igualarse. Ningún otro grupo de ocho cantantes ha sonado de esa manera. Él sabía lo que quería; lo sabía instantáneamente”.

Ese sonido —disponible abundantemente en línea, vía YouTube y otras formas de transmisión— fue siempre alegre, accesible y orientado, como dijo John Lomacang, “al corazón”. Se alegraba de incorporar melodías y arreglos cristianos contemporáneos al repertorio del grupo.

El grupo Heritage interpretó cantos hechos famosos por artistas tales como Amy Grant, Michael English, Bill Gaither y otros. Sin embargo, la música era presentada en un formato confortable que hallaba eco en la audiencia. Aun en otros países, en donde el inglés no era el idioma hablado por la audiencia, las multitudes se unían al canto mientras el grupo Heritage presentaba música que alababa a Jesús.

 Buscaba decisiones en favor de Cristo en cada concierto

Cada concierto terminaba con un llamado de Max Mace a la audiencia para que aceptara a Jesús como Salvador. Él mismo, o uno de los integrantes del grupo, oraba con cada persona que pasaba adelante.

Max Mace, el más joven de tres hermanos, procedente de Eagle, Idaho, fue un cantante desde su juventud, quien formaba un trío con sus hermanos Jerry y Ron; los hermanos jugaban también softball. En la Academia Adventista Gem State, de Idaho, cantó en cuartetos, cosa que continuó haciendo en Walla Walla College, ahora Universidad Walla Walla.

Durante sus años de colegio y de jugar softball, Max Mace obtuvo un trabajo en la panadería del plantel, por la que una joven llamada Lucy Hatley pasaba cada mañana. Ella cursaba el último año de academia o escuela de nivel secundario y poseía talentos musicales. La pareja contrajo matrimonio un año después de la graduación de secundaria de la joven, unión que cumplió 62 años al principio de 2020.

El matrimonio Mace trabajó en los Laboratorios United Medical Labs en Portland, Oregon, desde donde también dirigieron un grupo de cantantes llamado los Rose City Singers que patrocinaba la compañía. Esta experiencia llevó al matrimonio Maces a formar un grupo viajero de tiempo completo, presentando música cristiana.

Esos primeros días no fueron siempre muy fáciles. Su hijo, Greg Mace, el ingeniero de sonido del grupo y cuya firma provee servicios de audio en grandes conciertos de otros artistas, recuerda la historia de la visita del grupo Heritage a la reunión campestre en Soquel, California, en 1971.

Al interpretar música a la cual algunos no estaban acostumbrados, la congregación permaneció en silencio durante la interpretación. Un presidente de asociación le dijo al director Mace: “Nunca he visto a un grupo que haga que en este lugar haya silencio”, recuerda Greg Mace. En 2019, el grupo Heritage regresó a una recepción mucho más entusiasta en Soquel, aun para algunos que estuvieron presentes en la reunión de 1971.

De giras en autobús a giras al extranjero

Pero las solicitudes siguieron llegando y muy pronto los Mace y sus cantantes recorrieron las carreteras de los Estados Unidos viajando a sus conciertos. En ese tiempo, Max y Lucy vendieron su casa y adquirieron un viejo y oxidado autobús  Greyhound Scenicruiser sin haberlo visto (dos vocalistas actuaron como sus representantes para elegir y comprar un vehículo específico) para viajar en él.

Con un trabajo de pintura y letrero que decía “Heritage Singers U.S.A.”, el autobús se convirtió en un cartel publicitario andante para el grupo, que presentaba al menos una cubierta o portada de álbum musical. La venta de sus discos en los conciertos y las ofrendas voluntarias recibidas durante estos eran frecuentemente los únicos medios de sostenimiento de los músicos viajeros y algunas veces tales ofrendas eran muy exiguas. Según recuerda John Lomacang, Max Mace permanecía inalterable.

“Había ocasiones en que no salíamos bien financieramente, por causa de las ofrendas.  Max exhibía resiliencia y decía algo similar a: ‘Eso no fue mucho, pero sigamos adelante’”, dijo Lomacang.

Eventualmente, la música de los Heritage Singers encontró una audiencia dentro del adventismo y otras iglesias cristianas, extendiéndose hasta el extranjero. Un miembro de iglesia procedente del extranjero, quien vio a los Heritage Singers en los Estados Unidos, se quedó impresionado por su música y sus resultados.

“La primera vez que escuché a los Heritage Singers, estaba estudiando en mi programa de maestría en música en la Universidad Andrews”, dijo Williams Costa Junior, un pastor, compositor y arreglista adventista de Brasil, quien actualmente dirige el departamento de comunicación de la Asociación General. “En 1975, ellos dieron un concierto en la Iglesia Pioneer Memorial, que fue inolvidable. Ese ministerio me tocó profundamente. Vi también a muchos jóvenes que asistieron al concierto y pasaron al frente durante el llamado hecho al final. El impacto espiritual ejercido sobre la audiencia fue muy visible”.

El Pastor Costa atribuye la recepción positiva hacia los Heritage Singers en Brasil a crear oportunidades para que los músicos locales expandan sus propios servicios dentro de la iglesia en Sudamérica. “Voy a estar eternamente agradecido a Max por su visión, pasión y dedicación, presentando a Jesús y el mensaje de salvación a través de la música en forma tan inspiradora”, añadió.

El grupo regularmente hizo giras en Europa y había planificado conciertos en 2020 en la República Checa y Rumania antes de que la pandemia global hiciera ese viaje imposible. Durante 35 años, el grupo Heritage celebraba un concierto anual post Día de Gracias en la Iglesia de la Universidad Loma Linda, ante un auditorio repleto de entusiastas oyentes.

La hija, Val Mace-Mapa hizo notar que el grupo cuenta con más de 200,000 seguidores en Facebook y que la noticia del fallecimiento de Max Mace registró más de 1,000,000 de comentarios en la página correspondiente.  Ella recuerda a su padre no solamente como su “mejor amigo”, sino también como alguien que era “el más perdonador”. “Él siempre quería estar seguro de que si se había cometido algún error, se arreglaran bien las cosas. Cuando él perdonaba, ya nunca más recordaba la ofensa”.

Más de 140 “Singers” en el escenario

Tal vez el punto culminante de la larga existencia por décadas del grupo, fue un concierto en 2016, en Ontario, California. Más de 140 de los cantantes del grupo a través de los años, incluyendo a Magdiel Pérez Schulz, asistente del presidente de la Asociación General, Ted N.C. Wilson, se reunieron sobre la plataforma durante tres horas de cantos y alabanzas. Las grabaciones del concierto en DVD y CD se encuentran entre los más populares del grupo; la música se transmite en muchos medios populares, incluyendo Apple Music y Amazon Music.

La cantante Jennifer LaMountain, aunque nunca formó parte del grupo, llegó a conocer a Max Mace y Heritage Singers durante su carrera profesional y recuerda las altas normas suscritas por Max Mace: “La excelencia era siempre parte de cualquier cosa que él hiciera. Él hacía surgir lo mejor de cada quien que le rodeara”.

De acuerdo con Tony Anobile, un pastor adventista del séptimo día y vicepresidente de la iglesia en la División Norteamericana, el impacto de Max Mace fue inmensurable.

“No podríamos saber de este lado de la eternidad la cantidad de vidas de personas que él tocó, trajo al Señor o mantuvo en el Señor. Él tenía un estilo único y a la gente le encantaba”, dijo. Max Mace y Heritage “fueron grandes embajadores de la iglesia en términos de predicación a través de la música”.

Y Conna Bond, quien conoció a su esposo Mark mientras estaba de gira con los Heritage Singers, recuerda a Max Mace como “una de las personas más bondadosas que haya jamás conocido. Era muy querido no solamente por su familia inmediata, sino también por la familia Heritage y la gran familia de intérpretes”.

Juntamente con Lucy Mace, lo sobreviven su hermano Jerry, su hija Val y esposo Art Mapa, su hijo Greg y esposa Adriane y sus nietos Austin Mapa y esposa Chloe, y Amber y Bella Mace. Un sepelio privado se llevará  a cabo en Placerville, California, juntamente con un servicio en su memoria que se celebrará en fecha futura en la Iglesia de la Universidad Loma Linda.

Tim Davis, un cantante y arreglista de larga trayectoria en el grupo Heritage, recordó a Max Mace como una persona verdaderamente auténtica. “Él fue siempre extremadamente genuino, amable, amante, fácilmente impresionable; era generoso y perdonador. Él era realmente un modelo de seguidor de Jesús, lo era verdaderamente”, dijo.

 

Y luego añadió: “Puedo decir que Max Mace era absolutamente auténtico y genuino. Era todo un héroe; lo era por seguro para para mí”.

 

Traducción – Gloria A. Castrejón