Esfuerzate cada día y haz de la lectura de la Biblia la mejor experiencia de tu vida, es más atractiva de lo que te imaginas. ¡No te arrepentirás!
Cursaba el primer año de la Carrera de Comunicación en la UNAM. L profesora que impartía la clase de Lengua y Literatura nos dejó leer en un fin de semana las aventuras de Sherlock Holmes, personaje desconocido para mí hasta ese momento. Sin embargo, para cumplir el requisito, compré el libro tan pronto como pude y fueron tan admirables el interés y el gusto que desarrollé por la lectura que me resistía a separarme del libro, hasta que finalmente lo terminé de leer.
Preparé el trabajo que me habían solicitado y recuerdo perfectamente que fui alumno que mejor calificación obtuvo.
La lectura de ese libro me cautivó, llamó mi atención, me hizo sudar, habilitó mi razonamiento, soñé despierto, me ilusioné, me hice llamar Sherlock Holmes y estaba dispuesto a resolver cualquier problema que viniera a mi vida, fue una extraordinaria lectura y aún la recuerdo con emoción. ¿Te ha sucedido algo similar? ¿Te has cautivado con la lectura de algún libro al grado de no querer separarte de él hasta terminar de leerlo?
Un libro que fue prohibido
Existe un libro que ha sido publicado en más de 2,000 idiomas en todo el mundo, es la Santa Biblia. Su lectura no siempre fue permitida, muchas veces fue condicionada a las porciones y propósitos de quienes tenían el control, cabe mencionar que la gente común no la entendía debido al idioma.
A consecuencias de las convicciones y el firme deseo que Dios puso en el corazón de Martín Lutero, la Reforma Protestante se convirtió en el parteaguas que brindó una nueva perspectiva para las Sagradas Escrituras. Su autoridad, su poder, su claridad y todos los beneficios que esta conlleva, comenzaron a difundirse por todo el mundo para beneficios de todos.
Este maravilloso libro no es producto de la invención humana, el artífice tuvo bien a compartir un mensaje salvífico que sobrepasa cualquier sueño, invento humano. Marvel, Disney, Hollywood y los mismos cómics resultan limitados en creatividad, los guiones no van más allá de un esquema que pronto se torna repetitivo y sin mayor atractivo, caso contrario a la Santa Biblia.
La Santa Biblia se destaca por ser una guía practica, es el mejor medio para no equivocarse, corrige hábitos dañinos, por muy arraigados que estén, hace que la vida tome sentido, es la base para entender el origen de la vida, aporta grandes beneficios políticos, sociales, ecónomicos, culturales, intelectuales y de otros temas que circulan en el amplio pensamiento. Si quieres ser diferente y recibir todos los beneficios de su lectura, te sugiero lo siguiente:
- Comienza: Nunca podrás saber ni entender lo qe te digo, a menos que comiences a leerla.
- Fija un horario: determina un tiempo especifico a una hora del día, principalmente antes de comenzar tus actividades diarias, o al terminarlas, pero si te es posible los dos casos, será mucho mejor. Te darás cuenta que las cosas complejas y difíciles se tornan fáciles y sin mayor exigencia: tendrás sabiduría y astucia para actuar en el día. Que nada sustituya este tiempo que designaste para escudriñar las Escrituras.
- Establece un plan de lectura: No necesariamente debes comenzar desde el Genesis hasta el Apocalipsis, porque te aseguro que de las Lamentaciones no pasarás, puedes considerar un estudio por Capitulos, por libros, como son historias de ficción, milagros, fracasos, héroes y asuntos pasionales. Si encuentras formas dinámicas y atractivas, seguro serás cautivado y harás de la Santa Biblia tu libro predilecto.
- Pidele a Dios fuerza de voluntad: si ya comenzaste con este desafío debes considerar que siempre habrá obstáculos. Pídele a Dios que te dé fuerzas para leer día a día y descubrir lo extraordinario que tiene para ti.
- Comparte lo que sabes: Una vez que descubras lecciones que te han ayudado, compártelas, solo así afirmarás lo que has aprendido y podrás ayudar a otros a disfrutar lo que Dios también quiere compartir con ellos.
Espero que estos consejos te ayuden a disfrutar la Palabra de Dios. Apasiónate al conocer la vida de los hombres y mujeres que eligieron caminar a lado de Jesús
Pero sobre todo que tu corazón sea enardecido por la presencia del Espíritu Santo.