Las Olimpíadas de Rio de Janeiro reunirán cerca de 17 mil personas de diferentes nacionalidades y creencias religiosas a partir de principios de agosto solo en la Villa Olímpica o Villa de los Atletas.
Gran parte de los competidores y personas que trabajan en ese gigantesco evento podrán contar con apoyo espiritual cercano y especializado. Un equipo de capellanes de religiones como cristianismo, budismo, islamismo, judaísmo e hinduismo se turnarán en el trabajo junto a los deportistas. Ellos trabajarán en un Centro Interreligioso y cada religión contará con cuatro capellanes. Entre los elegidos para esa actividad está el pastor adventista inglés Richard Daly.
Daly, de 49 años, casado y con tres hijos, ya tiene experiencia en otros grandes eventos deportivos. Es capellán desde 2000, cuando participó de los juegos olímpicos de Sydney, en Australia. Sirvió en la misma función en 2004 (Atenas), 2008 (Beijing, China) y en 2012 (Londres), donde hizo su trabajo junto con otros 60 capellanes voluntarios. El pastor se desempeña como director de Comunicación de la Unión Británica de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, región administrativa que administra la organización en Inglaterra, Irlanda, Escocia y País de Gales. “Mi papel, en las Olimpíadas, ha sido tanto de capellán como de responsable por reportar noticias sobre los juegos a radios y TV cristianas de Londres”, comenta Daly. Recientemente recibió la invitación a participar de uno de los eventos en conmemoración de los 90 años de la reina Elizabeth II en la Catedral de Saint Paul junto con otras 50 personas seleccionadas.
La relación del pastor adventista con el deporte es un poco más antigua. En una entrevista a la Agencia Adventista Sudamericana de Noticias (ASN) explicó que fue atleta durante algunos años, pero terminó desistiendo de la carrera deportiva por motivo de su fidelidad al sábado. Él dejó registrada un poco de esa historia en el libro The Christian Race.
No está permitido el proselitismo religioso, pero sí aconsejar en el área espiritual, donde participan varios capellanes, inclusive el pastor adventista de Londres.
En Rio de Janeiro
Richard Daly tendrá credenciales en los medios de comunicación al llegar, el 7 de agosto, a las Olimpíadas en Rio de Janeiro, pero también servirá como capellán voluntario en el estadio de atletismo. Él explica que la influencia sobre los atletas es muy grande. “Converso con los atletas y oro por ellos. Cuando actué como capellán en las Olimpíadas de Londres, realicé un culto el sábado para los que guardan el sábado. Esos cultos les permitieron guardar el sábado a los atletas, como también a sus familiares y otros voluntarios”, recuerda.
Para el pastor adventista, esa actividad es una excelente oportunidad de compartir el mensaje en el cual los adventistas a un gran número de personas de varias partes del mundo creen. Los adventistas sudamericanos, inclusive, planean una serie de acciones sociales durante la última semana de los juegos, especialmente a partir del día 14 de agosto. Fue convocado un grupo de poco más de 800 voluntarios de ocho países que se concentraron en Rio de Janeiro para cooperar con la comunidad local. En diferentes partes de la ciudad sede se realizarán acciones de carácter ambiental (conservación de árboles), donación de sangre, más de 20 ferias de orientación sobre salud preventiva, caminata por la paz, entre otras iniciativas de apoyo.
Las Olimpíadas son consideradas uno de los mayores eventos del mundo. En el evento que se realizará en Rio de Janeiro por primera vez, según los datos de los organizadores, serán 42 campeonatos mundiales de distintas modalidades deportivas, con 306 pruebas, realizados en 17 días que reúnen más de 10.500 atletas de 206 países. Trabajan en ese evento más de 45 mil voluntarios.