Los líderes adventistas del séptimo día solicitaron a los miembros de iglesia local que ayuden a los afectados por el ataque con el camión que mató a por lo menos 84 personas e hirió a muchas otras, incluyendo a siete creyentes adventistas, en la ciudad francesa de Niza.
Un camión grande se abrió paso a través de una gran multitud de personas que observaban los fuegos artificiales de la celebración del Día de la Bastilla en la noche del 14 de julio, dejando un rastro de 2 kilómetros de derramamiento de sangre antes de que la policía matara a tiros al conductor.
El viernes, la División Intereuropea de la Iglesia Adventista, que comprende 13 países incluyendo a Francia, expresó que “una vez más somos testigos de crueldad y violencia absurdas. Condenamos firmemente tales acciones horrorosas”.
La sede de la iglesia en Europa anunció, citando a un pastor local, que siete miembros adventistas fueron heridos en el ataque. No hubo más detalles disponibles de inmediato.
Asimismo, la sede de los adventistas informó que las autoridades locales estaban buscando donantes de sangre e instó a los miembros de iglesia local a encontrar formas de ayudar a los que están sufriendo.
En una declaración escribió: “Solicitamos a nuestros miembros de iglesia local que apoyen los esfuerzos de asistencia y de ayuda. Solicitamos a los miembros de nuestra iglesia mundial que oren intensamente por todos los involucrados en esta tragedia”.
El ataque en Niza, que ocurrió durante la fiesta nacional más importante de Francia, sigue a sucesos violentos en Iraq, Turquía, Sudán del Sur, los Estados Unidos de Norteamérica, y en otros lugares que han sacudido el mundo en las semanas recientes.
El presidente de la Iglesia Adventista, Ted N.C. Wilson, expresó su consternación en su pagina de Facebook porque “a las muertes trágicas de personas en los Estados Unidos ahora les siguen muertes terribles en Niza, Francia”.
Wilson agregó que “las muertes y circunstancias extrañas parecen estar aumentando en varias regiones del mundo. Por favor, oren por las familias de los seres queridos que han muerto en ambos lados del Atlántico”.
El líder mundial de los adventistas instó a orar por la paz y la estabilidad en todo el mundo.
“Renovemos nuestra relación con el Señor cada día para que podamos estar listos para dar testimonio de él en cualquier acontecimiento extraño que pueda ocurrir donde sea que vivamos. El Señor quiere usar a su pueblo para mostrar una conducta semejante a la de Cristo y dar su testimonio al mundo para que pueda ver lo que una vida transformada es capaz de hacer en medio de tal caos y trauma. Permanezcamos firmes en nuestra fe y dependientes del Señor por nuestra seguridad y testimonio personal a los demás, al señalar a la gente el Príncipe de Paz y su pronta segunda venida”.
Raafat Kamal, presidente de la División Transeuropea de la Iglesia con sede en Gran Bretaña, del otro lado del Canal de la Mancha, dijo que ahora más que nunca es importante hablar de “la gran esperanza de Jesucristo y su pronto regreso”.
Kamal indicó en el sitio web de su División: “Es con conmoción y pena que nos despertamos con estas noticias sobre las tragedias de Niza. Continuamos siendo testigos del desarrollo del gran conflicto en nuestro mundo quebrantado y recordamos nuestra importante misión de hablar y vivir la gran esperanza de Jesucristo y su pronto regreso. Nuestras oraciones están con las personas afligidas por la pérdida de sus seres queridos, y rogamos puedan ser consolados”.