Cuando escuchó que mencionaban su nombre como la ganadora de la edición 2016 de la competencia bíblica “Bible Boom”, su rostro mostró que le costaba creerlo. Y lágrimas comenzaron a rodar por sus mejillas cuando se dio cuenta que realmente era así.
Zarith Méndez, de la región Colombiana del Norte, fue declarada la ganadora de la competencia “Boom Bíblico” de la División Interamericana y recibió el Trofeo Caleb para 2016. Con solo 15 años, Méndez es la ganadora más joven del “Boom Bíblico” en los trece años de esta competencia que abarca a todo el territorio. De pie frente a miles de adventistas en San Pedro de Macorís, República Dominicana, el pasado sábado 10 de diciembre, apenas logró contener sus emociones.
Méndez se dedicó a sonreír mientras un grupo de fotógrafos se arremolinaba a su alrededor para registrar ese emocionante momento. Mientras Méndez se enjugaba las lágrimas, pensó en los milagros que la habían llevado hasta esa competencia final.
Solo 24 horas antes de la competencia, voló en avión por primera vez, después de haber obtenido solo unas semanas antes su pasaporte.
“Cuando escuché mi nombre, no lo podía creer”, dijo Méndez. Cuando se dieron a conocer los resultados de la primera ronda de preguntas, ella ocupaba el décimo puesto, pero pasó a ocupar el segundo lugar en la cuarta ronda. Méndez obtuvo 450 puntos en el menor tiempo de 3.56 minutos para responder 45 preguntas sobre los libros de Josué, Jueces, Rut, y los capítulos 1-12 del libro “Patriarcas y Profetas”, de Elena G. White.
Como principal ganadora, Méndez, que en un año y medio planea terminar la escuela secundaria, recibió una computadora nueva, dos medallas y una beca para estudiar en la Universidad de Montemorelos, en México.
Méndez ingresó a la competencia regional de su unión por primera vez este año después de enterarse de ello en un camporí de guías maestros en su región. “Vivo en una zona muy rural, y tengo que ir a otro pueblo para conectarme a Internet, por lo que, tan pronto como en junio me enteré de la competencia, decidí estudiar”, añadió. Las seis horas diarias que dedicó a estudiar la Biblia entre sus clases y las horas cosechando limones después de la escuela en la granja de sus padres valieron la pena.
En el proceso, se enamoró del libro de los Jueces y de Patriarcas y Profetas. “Ha sido una experiencia excelente para mí”, dijo Méndez. “Solo enterarse de la experiencia por la que pasaron otros y la historia del mundo me ha enseñado mucho más sobre Dios y la necesidad de ser fieles y obedientes a la Palabra de Dios”.
Méndez sonríe solo al pensar en contar a su hermana y sus padres de su aventura, y en cuánto quiere animar a los miembros de su grupo pequeño en el Distrito Adventista de Edén, en Cúcuta, para que estudien más la Biblia. Horas después de ganar, aún no había podido comunicarse con su familia.
Méndez se maravilla ante todas las bendiciones que ha recibido desde el momento en que ingresó a la competencia bíblica. Como ganadora de la Unión Colombiana del Norte en octubre, recibió una beca de un año en la Universidad Adventista de Colombia en Medellín. Quiere estudiar medicina, y aguarda con ansias ingresar a la competencia bíblica del año que viene en su distrito.
Para María González, de 16 años, quien obtuvo el segundo lugar en la final de la competencia bíblica, ingresar a la competencia regional del año que viene en su iglesia en Maracay, en la región Venezolana Oriental, no es algo que tenga que pensar mucho. “Quiero regresar una vez más el año que viene al ‘Boom Bíblico’ para obtener el primer puesto”, dijo González.
“Dedicar tiempo a estudiar la Biblia nos acerca a Dios y nos ayuda a ver la Misericordia que él tiene sobre nosotros, no importa cuánto pequemos”, dijo. En el libro de Jueces, su favorito este año, aprendió cuán perdonador fue Dios con su pueblo, y la llevó a memorizar, releer y estudiar más la Biblia cada día y toda vez que no tenía clases o tareas escolares.
“Cada vez que estudio la Biblia, logro retener todo lo que leí”, dijo González. Es diferente que cuando la joven estudia diferentes asignaturas para la escuela. “Todo lo que leo de la Biblia, me queda grabado, así que no pienso parar”. Ya le ha dicho a su hermana de 12 años que comience a prepararse para estudiar la Biblia de manera intencional porque eso es lo importante, añadió. Gónzalez recibió una iPad Mini y una medalla por haber obtenido el segundo puesto.
Hernán Pérez, de Guatemala, que obtuvo el tercer puesto, dijo que ha estudiado la Biblia sin interrupción durante los últimos tres años. Estudió durante cinco horas al día: dos por la mañana, una después del almuerzo, y dos por las noches. Pérez quedó a diez puntos de la ganadora, pero se mostró más que feliz de estar entre los primeros tres. Pérez también recibió una iPad Mini.
Pérez, que tiene 25 años, se siente como un veterano en comparación con las más de dos decenas de finalistas adolescentes de este año. Pérez obtuvo el segundo lugar en su país el año pasado, y estaba decidido en llegar a la final del “Boom Bíblico” de este año.
“¡Qué diferencia ha hecho en mi vida espiritual estudiar la Palabra de Dios!”, dijo Pérez. “Jamás imaginé cómo podía transformar mi vida, cuánta sabiduría he obtenido…ha sido maravilloso”.
Solo tres uniones no estuvieron representadas en la competencia final de este año. Como resultado de problemas de visado y otras cuestiones, los finalistas de Cuba, las Antillas Francesas y Guyana, y la región Mexicana del Norte no lograron estar presentes.
El “Boom Bíblico” no tiene que ver con un examen o una competencia, dijo el pastor Al Powell, director de Ministerios Jóvenes de la División Interamericana al dirigirse a los finalistas y la audiencia durante el evento final.
Veintenas de jóvenes pasaron el sábado 10 de diciembre desde temprano por la mañana hasta el evento final del “Boom Bíblico” en la noche dedicados a la alabanza y la adoración. El programa del día también incluyó representaciones dramáticas y una investidura de líderes de jóvenes.
Entre ellos, se encontró Neida Pérez, de la República Dominicana, quien en 2006 tomó parte en la competencia del “Boom Bíblico” de la División Interamericana, ocupando el cuarto lugar, y más tarde regresó en 2010 para la súper final del “Boom Bíblico”, terminando en segundo lugar.
“No podía perderme este evento”, dijo Pérez. “Participar de esta iniciativa bíblica y profundizar el estudio de la Biblia es algo que nos acompaña por el resto de la vida. Es un tesoro inmensurable, porque la Biblia llega a ser parte de uno”.
Para el año próximo, los libros de estudio para la competencia en la División Interamericana incluirán los libros de Daniel, Oseas, Joel y los capítulos 39-44 del libro “Profetas y reyes”, de Elena G. White. La competencia final del territorio se llevará a cabo en Cancún, México, el 2 de diciembre de 2017.