La prevención del cáncer de mama comienza en la infancia.
En verdad, la prevención comienza antes del embarazo. Sí, porque si la futura mamá no presta atención a su estilo de vida, principalmente a su alimentación y ejercicio, y al aumento de peso, eso afectará al feto durante el embarazo. Así, si el bebé nace con exceso de peso, tendrá un mayor riesgo de contraer enfermedades a lo largo de su vida, y si fuera “la” bebé, ella tendrá un riesgo excesivo de padecer cáncer de mama.